Brasilia, 22 mar (Prensa Latina) El Tribunal Regional Federal de la segunda región (TRF-2) debe analizar hoy el pedido de habeas corpus hecho por la defensa del expresidente brasileño Michel Temer, arrestado la víspera en un caso de corrupción.
El relator del caso, el juez federal Iva Athié, debe adoptar una decisión preliminar y luego someterla a la Primera Sala Especializada del TRF-2 para juzgar el mérito de la causa. Es decir, para calificar si el encarcelamiento fue correcto o no.
La víspera, el juez federal de Río de Janeiro Marcelo Bretas decretó la prisión preventiva del exgobernante luego que la Fiscalía lo acusara de haberse favorecido de sobornos pagados por la Engevix, a cambio de beneficiar a la constructora en contratos con la empresa estatal Eletronuclear.
Bretas afirmó que el exjefe de Estado era el principal líder de una organización criminal que funcionó durante 40 años y desvió más de 473 millones de dólares.
El magistrado también ordenó la detención de otras siete personas, entre ellas a Wellington Moreira Franco Bretas, exministro del gobierno de Temer, y al excoronel de la Policía Militar João Batista Lima, íntimo amigo y aliado del extitular del Ejecutivo.
De 78 años, Temer pasó la noche en una sala especial en la Superintendencia Regional de la Policía Federal (PF) de Río de Janeiro, en la zona portuaria de la ciudad.
También este viernes debe prestar su primera declaración a la PF sobre los actos que se le acusan.
Anoche el exmandatario tuvo la visita de Carlos Marun, ministro de la Secretaría de su Gobierno y quien comentó a la prensa que su exjefe se encuentra muy triste, sorprendido e indignado, pero que tiene confianza en la justicia y espera que su nueva realidad se «revierta lo más rápido posible».
Temer asumió el poder en 2016 cuando se depuso a la presidenta constitucional Dilma Rousseff mediante un golpe parlamentario-judicial.
Durante su mandato (2016-2018) fue denunciado por corrupción pasiva, obstrucción de la justicia y formación de pandilla. En todos los casos las imputaciones fueron archivadas, pero el 1 de enero cuando entregó el sillón presidencial al político de extrema derecha Jair Bolsonaro, perdió el foro privilegiado.